Fabulosa casa independiente, enclavada en finca totalmente cerrada con altos muros de piedra y con un jardín de unos 350 m2 donde sin duda podrá disfrutar de la tranquilidad y la privacidad que ofrece su excelente ubicación en el mismo Llanes.
La vivienda, reformada con materiales de excelente calidad, tiene una superficie total de 159 m2 distribuidos en tres plantas.
Se trata de una construcción típica asturiana en piedra y madera orientada al sur y muy soleada durante todo el día.
En la planta baja, se encuentra el garaje, con capacidad para un vehículo, donde también está la zona de lavandería y la caldera de gasoil. En esta misma planta podemos encontrar una de las entradas a la casa, que a través de una puerta de cuarterón nos da acceso a la vivienda a través de una escalera de madera.
Una vez en la primera planta, llegamos al salón-comedor con chimenea y cristaleras con acceso y vistas al jardín. En la misma estancia encontramos la cocina, en madera, ladrillo y piedra, que aporta a este espacio un toque muy acogedor.
A la segunda planta accedemos por la misma escalera central de madera, y encontramos los dos dormitorios, con armarios empotrados, ambos muy luminosos y orientados al sur por su galería de madera de Iroko con vistas al jardín. Igualmente, en esta planta se encuentra el vestíbulo y el baño completo con bañera.
En la parte exterior está el jardín, de unos 350 m2, soleado durante todo el día. Sin duda un privilegio y más aún por la ubicación de la vivienda. También encontramos un cobertizo reconstruido en oficina y una zona cubierta para la guarda de aperos, ambos espacios con muchas posibilidades para la vivienda.
Al jardín también se puede acceder a través de una puerta lateral a la que se entra través de un portón privado.
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